lubina salvaje

El sábado mi marido se fue de pesca a la playa y a mediodía cuando vino a casa me trajo una espléndida Lubina salvaje de casi 600 gr.
Cuando se tiene una ocasión así desde luego no se congela, se consume de inmediato para poder apreciar todos los sabores y matices de un pescado tan fresco y delicioso.
Lo cocinamos a la sal y he pensado que no estaría de más compartir la receta.

LUBINA A LA SAL

Ingredientes : Lubina, Sal gruesa para horno y agua.

Preparación : La Lubina NO se escama, NO se lava, NO se le quitan las tripas, a menos que nos de asco o manía dejarle las tripas. Si así fuera se sacan por la "" garganta "" junto con las branquias. Es una bandeja de horno se pone una cama de sal y encima colocamos la Lubina, la tapamos por completo con la sal.

Aquí tendremos la precaución de dejar la aleta fuera de la sal (os he puesto una fotografía para que lo veais), y os preguntareis porqué dejar la aleta así, pues es un truco que me enseñó mi cuñada Vicenta y que funciona de maravilla.

Bueno seguimos, salpicaremos la sal con un poco de agua. Se enciende el horno en posición pescado o placa superior e inferior y una temperatura de 180 - 190º C, durante aproximadamente 20 minutos.
Y ... ahora es cuando vemos para qué sirve lo de la aleta .... si al tirar de ella la aleta sale fácilmente es que el pescado ya está hecho, si por el contrario se resiste.. dejaremos unos minutos más en el horno.
Aunque parezca mentira, el punto de sal es el correcto, ni mucho ni poco y la lubina queda super jugosa. Lo podeis acompañar con salsa mahonesa o salsa coktail, pero probarlo primero sin salsa para apreciar todos los matices del pescado.

Cuando la sacais del horno debeis romper la sal que se habrá quedado dura como una piedra, retirais la sal. Vereis que la piel de la lubina se separa con facilidad de la carne. Tened cuidado con que no caiga sal sobre la carne una vez retirada la piel.

A disfrutar....... ahhhh... el mismo sistema podeis emplear con la Dorada, incluso la aleta famosa.