lunes, 26 de agosto de 2013

Truquioca nº 10

Hoy el tema va de conservas.
 
Algunos sois conserveros por afición, otros por tradición, otros por economía y otros acabais de aterrizar en este apasionante mundo y podeis tener dudas.
 
Hace ya muchos años que me dedico a conservar todo lo que puedo por el método de envasado al vacío o al baño María, que por otra parte es una buena garantía de conservación.
 
Como la más básica tendríamos la conserva de tomate al natural y ésta la podríamos hacer hoy y consumir mañana sin problemas.
 
Sin  embargo muchas otras conservas cambian con el tiempo.
 
Mi truqui de hoy es más una recomendación resultado de la experiencia.
 
- La conserva de tomate frito (tomate, aceite, sal, azúcar) no necesita más reposo, pero si queremos hacerla más sabrosa y añadimos hierbas como el orégano, tomillo, romero o incluso un poco de pimienta molida, entonces sí os recomiendo dejar pasar unos dos meses antes de consumirla porque se concentrará el sabor de las hierbas dando como resultado un tomate frito mucho más aromático y que nos enriquecerá nuestros platos.
 
- De igual modo se debe proceder con la salsa de tomate (tomate, cebolla, aceite, sal, azúcar, y / o hierbas aromáticas)
 
- En cuanto a las conservas dulces, mermeladas por ejemplo, el caso más acusado con que me he encontrado ha sido con la mermelada de naranja amarga. Recién hecha ya la podemos consumir siempre que nos guste el sabor muy potente de la naranja amarga. Sin embargo esta mermelada con un tiempo de reposo de unos meses e incluso 1 año, suaviza el amargor dándole a la mermelada un envolvente sabor, agradable al paladar, que no recuerda los cítricos que usamos pero habiendo perdido una parte de esa agresividad.
 
- Lo mismo sucede en el caso de incorporar otros ingredientes como un palito de canela o una vaina de vainilla, ambas enteras, que necesitan un tiempo para desprender todos sus aromas y cederlos a las mermeladas.
 
Hasta el próximo truqui. Saludos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario